Cobarde



29/06/14

I
Un saludo que acontece por la tarde
me mostraba bondadosa simpatía,
más que eso tu mirada con la mía
simulaban una cupla impresionante
que seguido fue aumentando como parte
de la magia que despierta en pocos días
la ilusión de no sentirme todavía
como un hombre que tardó por ser cobarde.

II
Me han faltado decisiones para darte
una muestra de completa valentía,
oportunamente leve picardía
de tus besos el también apoderarme;
tus caderas me suplican amarrarte
a mi cuerpo con rotunda alevosía
para hacer que tus pasiones y las mías
sobrepasen las fronteras al tocarte.

III
Sólo un roce es suficiente para atarme
al delirio que provoca tu sonrisa
más de una de las veces que me avisa
el motivo de tormenta muy salvaje;
yo deseo ser el mismo personaje
que en tus sueños no conserva la camisa
si despacio con tu piel que me hipnotiza
te aproximas para luego enamorarme.

IV
No consigo explicaciones semejantes
al delirio de tenerte tan sumisa
en mis manos que no pierden la premisa
del acceso hasta tu pecho suplicarte;
soy ladrón o soy bandido al despojarte
de tus besos cuando inicio la conquista
en tu cuello que me dio más de una pista
para ser ya más valiente que cobarde.

Héctor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario